QB Kenny Pickett, Pittsburgh Steelers

QB Kenny Pickett, Pittsburgh Steelers

El proceso de los Steelers con Kenny Pickett está doliendo, pero puede valer la pena

Los Steelers fueron derrotados 37-30 por los Bengals el domingo anterior, haciéndose con su séptima derrota del año y cayendo al fondo de la AFC North. La verdadera problemática no es el resultado, sino que realmente fue un juego donde, con un mejor quarterback, Pittsburgh fácilmente pudo haberse hecho con el triunfo y mantener vivas sus esperanzas por playoffs este 2022, sin embargo, no fue el caso. En otras palabras, el proceso del equipo con el QB Kenny Pickett está doliendo, pero podría valer la pena.

Kenny Pickett: pierda ahora, gane mañana

Durante el Draft 2022 de abril anterior, los Steelers decidieron en la primera ronda que Kenny Pickett era el elegido para suceder a Ben Roethlisberger, pero por obvias razones el proceso para que Pickett pudiera llenar los zapatos de Big Ben sería lento y complicado. Claramente, ello aún no sucede y resulta obvio: casi ningún quarterback entra dominando la liga como, ejemplificando, Patrick Mahomes. Pickett tampoco ha sido la excepción, y ahora en Pittsburgh deben enfrentar dicho arduo desarrollo.

Más precisamente, Pickett tomó las riendas de esta ofensiva desde el entretiempo de la Semana 4 ante los Jets cuando, supuestamente, el QB Mitchell Trubisky tuvo un altercado en los vestidores con el WR Diontae Johnson. Desde entonces, las tareas de Pickett han sido bastante complicadas. Considerando que por ahora no es más que un novato, iniciar su carrera profesional ante Jets, Bills, Buccaneers, Dolphins, Eagles, Saints y Bengals no es sencillo en lo más mínimo, y sus estadísticas lo reflejan.

Momentáneamente, Pickett ha completado 155 de 237 envíos para 1 426 yardas y tan solo 3 TD contra 8 INT, números nada sólidos pero que gradualmente han mejorado. Claro ejemplo es que el fin de semana anterior ante los Bengals completó 25 de 42 envíos para 265 yardas, 1 TD, 0 INT y QB Rating de 85.9. Dicho de otra forma, tanto en yardas, TD:INT ratio y rating, es su mejor partido en las últimas cinco semanas, aunque en porcentaje de envíos completos (59.5 %) es su peor juego del año.

No obstante, a Pickett exclusivamente no se le puede culpar por la derrota ante Cincinnati. Es cierto, sigue volando a sus receptores, continúa lanzando el ovoide a terreno de nadie en jugadas donde pudiera ganar yardaje por la vía terrestre, y debido a él, los Steelers tienen la quinta peor ofensiva del año en cuanto a puntos por partido. Sin embargo, sus wide receivers tampoco le han ayudado cuando ha mostrado destellos de calidad, y su valentía e ímpetu, más temprano que tarde comenzará a rendir frutos.

La paciencia es una virtud

Se avecinan tiempos mejores en Pittsburgh, quienes después de una seguidilla de calendario bastante complicada, a partir de ahora se medirán ante rivales más asequibles que darán mejor pauta para conocer a detalle dónde se encuentra Pickett. Los Steelers se medirán el próximo domingo ante unos inconsistentes Colts, y luego ante Falcons, Ravens, Panthers y Raiders. Dejando a Baltimore de lado, Pickett debe demostrar que puede aprovecharse de rivales, teóricamente, de facilidad.

Sin embargo, en el mejor de los casos donde los Steelers salgan airosos de cada uno de los juegos mencionados, quizá ya es demasiado tarde. Esta campaña, con solo tres victorias y siete derrotas, es momento de darla por perdida. Solo un milagro puede hacer que Pittsburgh sueñe con playoffs. A partir de ahora, se trata de evaluar si Pickett es o no el verdadero quarterback franquicia que esta organización pide a gritos pues, realmente, es lo único que les hace falta para volver a un estatus de contendientes.

La mala noticia para los dirigidos por Mike Tomlin, quien está por tener su primera temporada perdedora desde que tomó su cargo en el ya lejano 2007, es que este proceso podría tomar más de una campaña, pero la paciencia es una virtud, sino solo hace falta voltear a Miami, donde los resultados con Tua Tagovailoa recién llegan en su tercer año. O preguntar en Chicago, quienes aún no lo ven reflejado en récord, pero que ya tienen motivos para emocionarse por Justin Fields.

Por ende, Tomlin lo debe tener en mente, y los aficionados también: se avecina lúgubre futuro a corto plazo, donde las victorias tardarán en llegar y donde este equipo no será candidato al Super Bowl, pero las mejoras que Pickett ha tenido semana a semana, y lo que se prevé de él, puede hacer que esta temporada de tristeza, y probablemente la siguiente, rindan frutos cuando menos lo vean venir. Dentro de mi parecer, Pittsburgh tiene ya quarterback a largo plazo, pero otra historia pudo haber sido este 2022.

Otra historia sería con Mitchell Trubisky

No, el objetivo de este artículo no es pretender que Trubisky podría haber sido el quarterback franquicia de los Steelers, porque claramente no lo es. Sin embargo, sí que lo pudieron haber extendido como quarterback titular unas cuantas semanas más. Pittsburgh decidió que Pickett tomara las riendas ofensivas tan temprano como en la Semana 4, con toda la campaña por delante y no ha rendido frutos. En cambio, Trubisky pudo haber sacado, sin duda, más por experiencia que por talento, par de victorias más.

Aquel que vio el juego ante Cincinnati no dejará mentir: con un quarterback funcional, era victoria de los Steelers, y lo mismo puede hablarse de la Semana 7 ante Miami, y de la Semana 4 ante los Jets (partidos de una posesión). En dicho panorama, Pittsburgh iría 6-4 y con motivos para seguir luchando este año, pero no es el caso. Desistieron rápido de un Trubisky que podría tenerlos en mejor puerto, mientras Pickett, desde el banco, podría haber continuado desarrollándose para estar listo en otra ocasión.

¿Deben los Steelers volver a Mitchell Trubisky? ¿Es Kenny Pickett verdaderamente el nuevo quarterback franquicia? Te leemos en los comentarios debajo de este artículo y en nuestras redes sociales.

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Comments (1)

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    Victor Tinoco

    Interesante tu punto de vista, coincido con muchos de los ellos y creo que se va por buen camino, con lo único que creo que falto comentar es que el coordinador ofensivo y su plan de juego tampoco han ayudado a que se den esas posibles victorias. Eso no quita del renglón que no mejora la línea ofensiva, los pases mal lanzados y no puede ser que el 98% por ciento de jugadas de pase solo sean 2 pasos hacia atrás y no aprovechen la movilidad de un QB novato, o que todo el esquema es predecible y ni se diga la jet sweep. Saludos

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