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Ahora le tocó a los Bengals aprender que los Chiefs pueden ganar en segundos

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El sueño terminó para los Cincinnati Bengals este año, tras caer 20-23 en Arrowhead frente a los Kansas City Chiefs en el AFC Championship. De una manera triste y decepcionante, el equipo se quedó al borde de su segunda clasificación al Super Bowl en años consecutivos.

Ya fueran los elementos externos o sus propios errores, simplemente se quedaron cortos de cumplir tan ambiciosas expectativas este año. En cuestión de segundos, los Bengals pasaron de la ilusión a la más amarga de las tristezas. ¿Cómo es que todo se derrumbó tan pronto?

 

Joe Burrow esta vez no fue suficiente

Admitámoslo, los Bengals fueron más allá de donde debían, con otra línea ofensiva mediocre, sin juego por tierra y esperando que toda su producción ofensiva viniera del QB Joe Burrow. Si bien es cierto que bastó para llegar hasta el Super Bowl la última vez, este no es un camino para ser campeones en la NFL.

En esta ocasión, no podemos decir que fue algo inevitable, porque la idea era contar con una línea ofensiva más sólida este año; sin embargo, cuando todo mundo empezó a lesionarse, fue inevitable caer en el mismo escenario de la temporada pasada. No obstante, en esta ocasión resultaba poco probable que fuera a dar resultados, y si bien apretaron el partido, esta fue una imagen demasiado constante:

Esto hizo que, mientras, por un lado, Burrow lanzó pases espectaculares como el de abajo, también fomentaba una exagerada tendencia a ser unidimensionales; pues, por su parte, el equipo no podía correr con el balón, de hecho, solo lograron 71 yardas totales por esta vía, siendo el propio pasador quien corrió más yardas (30):

Por consiguiente, al coordinador defensivo de los Chiefs, Steve Spagnuolo, solamente le bastó con planificar contra el pase, para lograr contener a Cincinnati por completo; y por desgracia, el HC Zac Taylor no tenía de otra que caer en este juego favorable para sus rivales. De una forma u otra, terminaron entregando dos intercepciones ante la enorme presión de la línea defensiva.

Eso sí, Burrow respondió como debía, aun cuando era un escenario injusto. Los que quedaron a deber fueron el resto de su equipo, que simplemente experimentó su propia experiencia Buffalo Bills en Arrowhead.

La defensiva de Lou Anarumo se derrumbó en segundos

La defensiva de los Bengals probablemente sea otra que mereció el triunfo… Hasta ese final. Y es que no puedes cometer un error así cuando el juego está en la línea, menos cuando nada tiene que ver con lo que hiciste hasta entonces:

En retrospectiva, y tras irse al descanso, los Chiefs ganaban 13-6, incluso debieron hacerlo por más. Al mismo tiempo que la ofensiva se veía sumergida en un bache profundo, la defensiva logró anular al QB Patrick Mahomes por casi dos cuartos, del segundo hasta casi el final del tercero. En ese lapso de tiempo, Cincinnati empató el partido.

Cuando volvieron a verse por debajo en el marcador con 03:53 por jugarse en el tercer cuarto, nuevamente ajustaron para darle tiempo a sus compañeros de empatar el juego 20-20. Es decir, no hubo manera de separar la lucha constante del equipo, sin la de esta unidad. No obstante, este deporte es de momentos, y como puedes ganarlos en unos, puedes perderlos en otros.

Aquí da la sensación de que algunas brechas de talento en el roster, son simplemente muy evidentes para ocultarse en juegos tan cerrados. Y siendo este el segundo año donde no ganan el título estando tan cerca (ahora un poco menos), también vale la pena analizar si esto es todo lo que podrán dar a partir de este momento.

¿El sueño de SB de los Bengals terminó aquí?

Todo equipo tiene una ventana para ganar un título en la NFL con el mismo roster; en el caso de los Bengals, probablemente se piense que la suya ya expiró. Normalmente, cuando tienes que pagarle a tus estrellas, vienen los problemas, y quizás las decisiones que vengan no sean sencillas.

Si bien está la más fácil de pagarle al QB Joe Burrow, también hay otras más complicadas; como la de pagarle a todos sus WR un contrato justo. También debemos creer que la secundaria podría verse distinta, y aún no le pagan al S Jessie Bates, por ejemplo. Pero al mismo tiempo, es inevitable no suponer que lo resolverán de la mejor manera; ya que tampoco son decisiones que vendrán al mismo tiempo.

Por lo menos tienen hasta 2024 para intentarlo otra vez con, básicamente, el mismo grupo, y tal vez ahora sí sea su año la próxima vez. Al menos tienen un QB élite, el cual no crece en los árboles, y espacio salarial para seguir gastando. Aunque queda claro que, con un par de lesiones, este roster vuelve a tener limitaciones en posiciones clave, y solo buscan compensar con sus estrellas.

La línea ofensiva, la secundaria, los corredores, siguen siendo posiciones o grupos que carecen de todo el talento necesario para aguantar una larga temporada como esta. Y siendo más duros con ellos, parece que se conformaron con el roster de 2021, creyeron recorrer el mismo camino y hacer muy pocos ajustes.

Cuando vienes de perder el SB, lo mejor es no ser tan conformista, algo que choca mucho con la propia actitud incombustible de Burrow; pero por su propia durabilidad y búsqueda de conseguir el objetivo, ya no es suficiente con eso. Es la triste realidad.

¿Qué piensan de la derrota de los Bengals?¿Qué les faltó esta vez? Pueden dejarnos sus comentarios debajo de este artículo o a través de nuestras publicaciones en redes sociales.

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