Los Jets de Aaron Rodgers: Super Bowl o Bust

En el papel, los New York Jets deben considerarse una nueva superpotencia en el panorama rumbo a la Temporada NFL 2023. Sin embargo, un gran poder conlleva una gran responsabilidad y quizás sea un peso demasiado grande para una franquicia que llevaba sin ser relevante en los últimos 10-20 años. Para su desgracia, no hay puntos medios a partir de este año; o traen el oro a casa o serán el ridículo de la campaña.

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New York Jets: ¿un súper equipo o una súper decepción en potencia?

Por extraño que parezca, es la segunda vez en esta década que New York posee un súper equipo de alguna de sus principales ligas; hace unos años fueron los Nets, ahora los Jets. La historia no suele ser amable con este adjetivo, pero es irreprochable que se lo han ganado.

“Con la plantilla que ya tienen y con la adquisición de Aaron Rodgers, añadiendo a un tipo como yo, ya saben lo que aporto, probablemente podríamos ser un súper equipo” dijo Cook antes de firmar con los Jets, cosa que hizo recientemente.

Esta clase de declaraciones suelen ser un baño de sal para los equipos de la NFL (y en general, cualquier deporte). New York lo sabe, por lo que por más que algunos analistas comparen la nueva aventura con el QB Aaron Rodgers con la vista en Tampa Bay cuando llegó Tom Brady, la realidad es que se asemeja más a la desafortunada situación de Brett Favre y los Jets en 2008.

August 7th, 2008: After 16 seasons, The Packers trade QB Brett Favre to the Jets

April 24th, 2023: After 18 seasons, The Packers trade QB Aaron Rodgers to the Jets pic.twitter.com/jM363GTFdr

— NFL Stats (@NFL_Stats) April 24, 2023

El predecesor de Rodgers en Green Bay empezó con todo esa temporada; ganó con NY 8 de 11 partidos para un récord de 8-3, incluso dejando rezagados a los todopoderosos Patriots que lidiaban con una severa lesión de Brady en esa época. El vacío de poder en la AFC East, hasta que Favre presentó sus inevitables signos de la edad al exigirse demasiado, desgarrarse el bíceps y perderse valioso tiempo de juego.

Al final perdieron cuatro de sus últimos cinco encuentros para un récord de 9-7, con 22 intercepciones de un Favre que no estaba teniendo un cierre de carrera digno. Aunque más importante aún: fueron incapaces de aprender a ganar sin un solo jugador, pese la supuesta excelencia con la que conformaron ese roster.

En una similitud aterradora, los Jets saben que están a una ausencia de Rodgers para verse igual que el año pasado bajo otro QB. Desgraciadamente, A-Rod no es el hombre de acero, y sin importar que es cuidado con algodones, eso no impidió que ya acumule dos lesiones en ambas pantorrillas en los últimos meses.

Algo que se analizaba en otro artículo es cómo la situación de Cook reflejaba un miedo irracional para no verse cortos de sus expectativas con una acumulación malsana de talento. En el fondo luchan no solo contra sus recién adquiridas expectativas, también contra una naturaleza que siempre ha sido perdedora y los ha obligado a autosabotearse en el pasado. Pero esa sensación invita a creer que estamos ante una futura fábula de los peligros de la ambición desmedida: quien mucho abarca, poco aprieta.

Los #Jets ✈️ con QB Aaron Rodgers, ¿podrán jugar el Super Bowl LVIII? 🤔

Acá lo discuten @elbuenluigi y @jorgetinajeroe ➡️ https://t.co/Qwg8B82ucJ#TakeFlight pic.twitter.com/bxtvtVi7ZZ

— Primero y Diez (@Primeroydiez) June 23, 2023

¿Consideras que los Jets logren ganar un Super Bowl en la etapa de Aaron Rodgers como su QB? ¿Por qué? Puedes dejarnos tus comentarios debajo de este artículo o a través de nuestras publicaciones en redes sociales.

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