¿Se puede culpar a Baker Mayfield de la derrota ante los Raiders?

Desde que Baker Mayfield es el QB titular de los Browns se ha hablado de las altas y bajas que tiene en su juego, y el día de hoy no ayudó a cambiar la conversación.

En la semana 6 ante los Steelers el partido de Mayfield fue sumamente malo (10/18, 119 yardas, 1 TD, 2 INT) y muchos hablaron de cómo él había sido parte importante del problema en ese partido. Luego vino el enfrentamiento ante los Bengals de la semana pasada, y ahí Mayfield volvió a cambiar el tenor de la conversación al lanzar para 297 yardas y 5 TD, incluyendo el envío de anotación que le dio la victoria de último momento a su equipo.

Hoy, ante los Raiders, los números regresaron a lo visto ante los Steelers.

La tarde de Baker Mayfield

Mayfield completó 12 de 25 pases para 122 yardas sin anotaciones o intercepciones en la derrota de su equipo por 16-6. Y los comentarios comenzaron de forma casi inmediata: otra vez vimos a Baker Mayfield entrar en su ciclo de juegos buenos y juegos malos. Pero hay que ser sinceros: al menos esta semana la culpa no es totalmente de él.

Primero que nada, este año ha quedado claro que la ofensiva de Cleveland está enfocada en el juego terrestre, y eso nunca arrancó realmente. Kareem Hunt sumó 66 yardas y el segundo mejor corredor fue el mismo Mayfield, que tuvo 29.  Si sumamos la pobre producción de su QB, los Browns se quedaron en 223 yardas totales durante el partido. Eso son apenas 15 yardas más de lo que los Raiders hicieron por tierra.

Que es el otro motivo por el que los Browns se llevaron la derrota esta tarde: su defensiva nunca encontró la forma de contener a Josh Jacobs, que sumó 128 yardas en 31 acarreos. Eso se tradujo en un tiempo de posesión de 37:43 para los Raiders por 22:17 de los Browns.

Si la ofensiva no tiene el balón es complicado que puedan hacer mucho. Y hoy Baker Mayfield no pudo hacer que su ofensiva avanzara, primero porque casi no tuvo el balón y luego porque su ataque terrestre no funcionó como se esperaba.

Así que, aunque suena bastante lógico, es complicado decir que el “ciclo de Baker Mayfield” existe. O al menos es un tanto arriesgado poner esta derrota totalmente sobre él. Hoy, como en muchas ocasiones en el football, el resultado del partido es un producto del esfuerzo colectivo, no del trabajo individual de la figura más llamativa a nivel mediático.