Los Minnesota Vikings consiguieron su primera victoria en casa para llevar su récord a 3-5 haciéndolo de forma dominante por segunda semana consecutiva con un marcador final de 34-20. En un partido en el que todo salió bien para los locales, la producción vino de tanto a la ofensiva como a la defensiva y más importante de jugadores diversos que no necesariamente son sus estrellas.
La producción ofensiva de los Vikings
Tenemos que comenzar por resaltar la increíble racha del corredor Dalvin Cook, quien volvió a rebasar las 250 yardas totales de ofensiva, registrando 206 en 22 acarreos con dos touchdowns, más dos recepciones para 46 yardas. Con esto, en las últimas dos semanas ha acumulado 369 yardas terrestres y 109 recibiendo.
Con la actuación del día de hoy, Cook registró su séptimo partido con por lo menos un TD (uno en cada juego en el que ha participado en esta temporada), manteniendo la racha más larga del equipo desde que Randy Moss registrara diez partidos consecutivos anotando entre 2003 y 2004.
Dalvin Cook has his 7th straight game with a TD, the longest streak by a Viking since Randy Moss scored in 10 straight games from 2003-04.
Cook has now scored a TD in 18 of his last 21 games played. pic.twitter.com/F3ayelKFz8
— ESPN Stats & Info (@ESPNStatsInfo) November 8, 2020
El juego terrestre fue tan dominante que, en el último cuarto, los VIkings decidieron jugar principalmente con Alexander Mattison y él acumuló 69 yardas en solo 12 acarreos.
Por aire, el quarterback Kirk Cousins tuvo un día tranquilo en el que registró 220 yardas y tres touchdowns y únicamente fue capturado en una ocasión. Lo más destacable en este aspecto de la ofensiva fue el hecho de que ninguna de sus tres anotaciones fue a sus receptores Adam Thielen y Justin Jefferson, sino que fueron dos para el tight end Irv Smith Jr. y otro para su corredor Ameer Abdullah.
La defensiva también hizo lo suyo
La frontal defensiva de los Vikings tuvo un juego destacado en el que la presión fue constante para el quarterback de los Lions, Matthew Stafford, quien fue golpeado en siete ocasiones, la última de las cuales lo sacó del juego, por lo que se presume que fue una conmoción, orillando a los Lions a continuar el juego con Chase Daniel en los controles. Dicha presión provocó que Stafford lanzara dos intercepciones y Daniel una más.
Defendiendo la carrera, contuvieron a la combinación de los corredores de los Lions a jugadas de corto avance y eventualmente el juego terrestre dejó de ser factor debido a la gran desventaja en la que se encontraban los visitantes.
Los equipos especiales, lo único bueno en Detroit
Corría la temporada 2007 aquella última vez que los Lions bloquearon una patada de despeje, hasta antes de la semana pasada, cuando lo lograron contra los Colts. Pero este día continuaron con un buen desempeño en ese aspecto, bloqueando no una, sino dos más.
Desafortunadamente para ellos, únicamente pudieron registrar una anotación como fruto de esos esfuerzos y esta vino muy tarde en el último cuarto cuando el equipo perdía por 21 puntos y lo único que consiguieron fue hacer el marcador más decoroso.
Con un viaje a Chicago la siguiente semana para visitar a un equipo de los Bears que lució mal esta semana, los Vikings buscarán continuar su racha positiva. ¿Se apretará la competencia por el segundo lugar de la NFC North? Esperamos tu opinión en los comentarios.
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