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El regreso de Aaron Rodgers a Nueva York: lo que aprendimos

El regreso de Aaron Rodgers a Nueva York: lo que aprendimos

Después de durar apenas un snap en 2023 con los New York Jets, Aaron Rodgers volvió al MetLife Stadium en circunstancias muy distintas: como quarterback de los Pittsburgh Steelers. Y lo hizo a lo grande. En un duelo cargado de simbolismo y emociones, Rodgers lideró a su nuevo equipo a un triunfo agónico de 34-32 en la Semana 1 de la NFL.

Rodgers, el protagonista absoluto

El veterano mariscal mostró que la edad y las lesiones no lo han frenado. Terminó con 22 pases completos de 30 intentos para 244 yardas y un rating de 136.7, demostrando que aún es capaz de controlar el ritmo de un partido y ejecutar con precisión quirúrgica. En los momentos clave, encontró a sus receptores y le dio estabilidad a la ofensiva acerera.

Fields mantuvo la tensión

Del otro lado, Justin Fields ofreció un espectáculo poderoso. Su capacidad para mover las cadenas tanto con el brazo como con las piernas mantuvo a los Jets con vida hasta el final. Sin embargo, cuando el reloj más pesaba, la defensiva de Pittsburgh logró contener lo suficiente para preservar la ventaja.

Claves del triunfo de Steelers

  • Rodgers fue paciente y efectivo en tercera oportunidad.

  • La ofensiva encontró balance con jugadas rápidas y de alto porcentaje.

  • La defensa ajustó en el último cuarto para frenar los embates de Fields.


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Para los Steelers, esta victoria significa más que un buen inicio de temporada: confirma que Rodgers puede ser la pieza que los lleve a competir en una AFC cargada de talento. Para los Jets, la derrota duele más allá del marcador. La ironía es inevitable: Rodgers prácticamente no jugó con ellos en 2023, pero regresó al MetLife para brillar con otro uniforme.

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