los Bengals y un histórico Joe Burrow vuelven a ensañarse con los Ravens

Por Quetzalcóatl Flores (@Quetzalcoatl_)

Este domingo los Cincinnati Bengals se acercaron un paso más hacia el campeonato de la AFC Norte al apalear a unos vapuleados Baltimore Ravens, quienes llegaron a este encuentro con 33 jugadores entre reserva de lesionados y positivos de COVID el partido terminó 41-21 con un dominio ofensivo tremendo por parte de Joe Burrow, Joe Mixon y compañía.

Barrida humillante de los Bengals sobre los Ravens en 2021

De este modo, Cincinnati completa la barrida divisional sobre los Ravens (algo no visto desde 2009) y, para un ataque que fácilmente desde los años ochenta no se caracteriza por ser potente, consiguió 82 puntos combinados y más de 800 yardas en una serie de dos juegos de 2021, sobre una de las franquicias más distinguidas por su sello defensivo (aunque claramente no es su caso este año).

Joe Burrow hace historia en el club de las 500 yardas

Los Bengals empezaron el festival de puntos con un gol de campo, sin embargo, los Ravens respondieron con una buena serie ofensiva que terminó en 7 puntos liderada, por el QB Josh Johnson que fue apenas contratado hace 10 días, mostrando una vez más que John Harbaugh iba a seguir compitiendo sin importar las circunstancias.

No obstante, las ausencias del lado defensivo de Baltimore se notaron de inmediato: la defensiva secundaria estuvo llena de jugadores del escuadrón de prácticas, solo el S Chuck Clark y los CB Tavon Young y Anthony Averett  fueron los titulares que iniciaban hoy, y el segundo salió lesionado durante la primera mitad de este partido. 

El QB Joe Burrow aprovechó esto al máximo, quemando en repetidas ocasiones a la secundaria de los Ravens, terminando con 525 yardas, 37 pases completos en 46 intentos y 4 TD. Esta fue la cuarta actuación con más yardas para un quarterback en la historia de la NFL y para entender más la importancia de lo hecho por el rostro de la franquicia de los Bengals está este tweet:

.@JoeyB‘s 525 passing yards are the 4th-most ever in a single game. Only @ProFootballHOF QBs Norm Van Brocklin & @WMoon1 & @matt8schaub have thrown for more.

He is the 2nd player ever with 3 games of 400+ passing yards & 3+ TD passes in his first 2 seasons, joining @DanMarino. pic.twitter.com/QTnPuMXtTm

— NFL345 (@NFL345) December 26, 2021

Burrow estuvo repartiendo sus pases con diferentes objetivos, dos de ellos, los WR Tee Higgins y el novato Ja’Marr Chase superaron las 100 yardas de recepción: el primero terminó con 194 yardas en 12 recepciones y 2 TD, mientras que el segundo obtuvo 125 yardas en 7 recepciones sin registrar TD.

Los Bengals no hicieron un solo despeje en todo el partido, y solo en dos series ofensivas patearon gol de campo, fallando uno de ellos, pero el dominio fue total. Por su parte el RB Joe Mixon corrió para 65 yardas en 18 acarreos además de sumar otras 70 yardas en 6 recepciones. 

Los Ravens compitieron en stats, pero no en el marcador

Del lado de los Ravens, el plan de juego ofensivo se veía bastante sencillo para Josh Johnson, que a pesar del resultado no tuvo una actuación atroz, pues terminó con 304 yardas, completando 28 de sus 40 pases lanzados, con 2 TD y 1 intercepción, similar a lo que había estado haciendo Tyler Huntley los pases los repartió entre 7 diferentes receptores (algo que esperemos Lamar haya aprendido durante estas ausencias).

El TE Mark Andrews tuvo nuevamente un gran partido, registrando 125 yardas en 8 balones atrapados y 1 TD, el WR de segundo año, James Proche, tuvo uno de sus mejores partidos, registrando 76 yardas en 7 recepciones. Además, El novato Rashod Bateman por fin logró su primer TD de su carrera en la NFL. 

¿Qué sigue para Ravens y Bengals?

Esta vez los Ravens no pudieron hacer un juego cerrado como las últimas semanas, y esta derrota ya es la cuarta consecutiva que los puede dejar fuera de playoffs, tomando en cuenta que 3 de esas 4  fueron ante rivales divisionales, sin contar con que los Bengals barrieron la serie este año.

A pesar de todo, las ocho victorias que tienen registradas, además de la sorpresiva derrota de los Chargers, aún los deja con vida en la carrera a postemporada, siempre que ganen los dos últimos partidos que les quedan en casa contra Los Angeles Rams y Pittsburgh Steelers.

 Cincinnati aún no puede confiarse, pues le quedan dos juegos complicados que los pueden dejar aún fuera de playoffs: la siguiente semana reciben a los Kansas City Chiefs y luego cierran con una visita a los Cleveland Browns.