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¿Ha comenzado el colapso anual de los Cowboys?

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Al momento, los Dallas Cowboys tienen una racha de tres derrotas en los últimos cuatro partidos, siendo la más reciente esta noche contra Las Vegas Raiders, en casa, en Día de Acción de Gracias por marcador de 36-33.

El partido tuvo que llegar hasta tiempo extra para ser decidido, ya que los Cowboys encontraron sentido de urgencia en el último cuarto y entraron en su mejor momento del partido anotando un touchdown y dos field goals para empatar el marcador con unos segundos restantes en el tiempo regular.

La indisciplina marcó la tónica del encuentro

Podemos hablar de las ausencias de los Cowboys todo lo queramos y sin duda no podemos desestimar el hecho de que no contaban ni con sus dos receptores principales (Amari Cooper y CeeDee Lamb) ni tampoco con sus dos pass rushers más importantes (DeMarcus Lawrence y Randy Gregory), sin embargo, esto no elimina el hecho de que el equipo se mostró completamente indisciplinado y eso solo recae en la responsabilidad del head coach Mike McCarthy.

La tónica del partido fueron los castigos; entre los dos equipos sumaron 28 para 276 yardas. Los más costosos, sin embargo, fueron para los Cowboys, quienes acumularon 166 yardas en penalizaciones en el encuentro, además de venir constantemente en situaciones cruciales.

La defensiva hacía un buen trabajo al detener en primer y segundo down, provocando tercera y largo, solo para que viniera un castigo en la siguiente jugada que prolongara la estancia de la ofensiva rival. Esto provocó que los Raiders tuvieran anotaciones mucho más sencillas de lo que ellos mismos esperaban.

Al ataque, por lo menos en una ocasión, las penalizaciones eliminaron puntos del marcador y otras tantas recortaron los drives colocándolos en posiciones de larga distancia para conseguir un primero y diez o dándole una nueva oportunidad a la defensiva de detener en tercer down.

La labor de los coordinadores de los Cowboys

En esta ocasión los muy alabados coordinadores del equipo, de ambos lados del balón, también dejaron que desear; comenzando por el hecho de que el juego terrestre logró únicamente un total de 64 yardas en el partido con un paupérrimo promedio de 3.2 yardas por acarreo. La línea ofensiva no pudo generar espacios de forma constante y en general el ataque vivió de chispazos.

Kellen Moore se vio limitado a tratar de usar a los receptores Cedric Wilson y Noah Brown muchas más veces de las que hubiera querido; sin embargo, hoy el esquema del ataque no fue, por mucho, tan creativo como en otras ocasiones en la temporada.

Por su parte, Dan Quinn, utilizó una tremenda cantidad de cobertura personal contra los receptores de los Raiders, apostándole a generar presión sobre el QB Derek Carr y, aunque en ocasiones lo logró, Carr lució tremendamente bien navegando la bolsa de protección, eludiendo a defensivos y comprando tiempo para encontrar abiertos a sus receptores campo arriba. Hoy Carr tuvo un juego de 373 yardas y 1 TD.

Además, el juego terrestre de los Raiders encontró los huecos necesarios para hacer daño frecuentemente. Sumaron 143 yardas en el encuentro por esa vía con un Josh Jacobs que encontró espacios entre los tackles y se llevó 87 yardas y 1 TD en 22 acarreos.

¿Qué significa esta victoria para los Raiders?

En una ultracompetida AFC West, esta victoria les viene perfecto a los de Las Vegas, ya que al no haber un equipo con récord perdedor en ella, cualquier paso en falso significa perder terreno.

Hoy están en posición ideal para pelear por postemporada y lo más importante es que han terminado con una racha de tres derrotas consecutivas y la próxima semana reciben al Washington Football Team.

¿Es momento de entrar en pánico con los Cowboys?

Tal vez pánico sea un estado extremo que no debería aplicar todavía, pero sin duda es momento de preocupación, por el mal desempeño del equipo.

Este es un equipo completamente diferente cuando tiene a todas sus armas en el campo, pero en este momento no puede considerar mucho más margen de error, ya que los Philadelphia Eagles simplemente están jugando bien y tienen un calendario de cierre de temporada bastante manejable, así que en un descuido podrían meter en problemas a los Cowboys.

El próximo jueves veremos a este equipo enfrentar a los Saints, que en este momento también están diezmados por las lesiones, pero eso podría cambiar para los dos equipos.

¿Qué sensaciones te deja la derrota de los Cowboys contra los Raiders? Te leemos en los comentarios bajo este artículo y en nuestras redes sociales.

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